Los divorcios siempre son complicados. Hay muchas decisiones importantes que tomar: quién tendrá la custodia de los niños, cómo serán las relaciones paterno-filiales, la disolución y adjudicación de los bienes, si vender o no propiedades comunes, decidir quién sigue viviendo en la casa, etc. La verdad es que incluso en aquellas ocasiones en que ambas partes tienen las mejores intenciones, pueden surgir controversias. Este tipo de problemas es muy común, ya que cada persona tiene intereses diferentes para con los bienes adquiridos durante el matrimonio y cada uno tiene derecho a reclamar en ellos la parte que le corresponde.
Por esta y otras razones, la ayuda de un abogado de divorcio es vital. Algunas personas piensan que es una medida exagerada, sobre todo en casos en que el proceso de divorcio es no contencioso, pero lo cierto es que nunca está demás contar con un buen asesoramiento legal.
Con los servicios de un abogado de divorcio, todo el proceso será más rápido y sencillo porque todo se hará conforme a lo dispuesto por la ley.
En los casos de divorcios contenciosos, las razones para contratar un abogado se multiplican. Lamentablemente, en muchas ocasiones es necesario defender sus derechos de quien hasta aquel momento fue su cónyuge. De lo contrario, una parte con una actitud más conciliadora que otra puede verse seriamente perjudicada.
Al contar con los servicios y la asesoría legal de un abogado, la persona podrá defender sus derechos y lograr que se le adjudiquen aquellos que le corresponden. No importa cuál sea la causa de divorcio, es un proceso desagradable para ambas partes. Contar con la tranquilidad de estar haciendo las cosas bien no tiene precio.
La experiencia y el conocimiento de un profesional son de gran ayuda a la hora de realizar todos los trámites necesarios, a tiempo y en forma. En los aspectos legales, es crucial que los documentos cumplan con todos los requisitos de formalidad y aquellas solemnidades que la ley exige. Igualmente, es importante que sean presentados dentro de los términos establecidos por la ley o por las órdenes emitidas por el tribunal. En los procesos de divorcio es muy habitual que alguno de estos términos se pase por alto, porque las personas afectadas suelen estar más pendientes de sus emociones que de cualquier otra cosa. Contar con la asistencia profesional de un abogado aportará la diligencia y el conocimiento necesarios para que todo vaya bien.
Los abogados del Estudio Legal y Notarial Lcdo. Juan Carlos Ortiz Arocho, cuentan con amplia experiencia profesional y se mantienen diligentemente actualizados respecto a las enmiendas y disposiciones legales necesarias. De igual forma, se mantienen al tanto de la jurisprudencia emitida por el más alto foro, tanto en el Tribunal Supremo de Puerto Rico como en el Tribunal Supremo de los Estados Unidos. Ante cualquier duda respecto a un proceso de divorcio, no dude en consultarles. Será un placer para la firma que un profesional de su equipo sea su abogado de divorcio para brindarle el máximo apoyo. También puedes conectarlos en Facebook para obtener más actualizaciones.